The Bookshop —cinta de 2017 y dirigida por la cineasta española Isabel Coixet— constituye, con su historia, actuaciones y locaciones, un bello homenaje a la literatura y a elementos importantes que la hacen posible: escritores, libreros y lectores. Se desarrolla en Hardborough, un pequeño pueblo de la Inglaterra de 1959. Ahí vive Florence Green (Emily Mortimer), una apasionada lectora y joven viuda, que decide —en contra de la educada pero implacable oposición vecinal— abrir la primera librería de la zona.
Gracias a la librería “La vieja casa” Florence vuelve a relacionarse con la gente, pues después de la muerte de su marido se aisló y su única relación con el exterior era a través de los libros. Sin embargo, ese exterior tiene algunas sorpresas y desafíos. Para empezar, Violet Gamart (Patricia Clarkson) no está nada contenta de que la librería se haya instalado en un lugar que ella deseaba convertir en un centro expositor de artes.
No obstante, también hay un inesperado encuentro con Mr. Edmund Brundish (Bill Nighy), que no sólo se convertirá en el primer cliente, sino que también será un fiel defensor de la causa ante los intentos persistentes y crueles de Violet Gamart por detener el proyecto. Este es quizá uno de los encuentros más bellos que propicia la librería en la vida de Florence. Ambos comparten un sentimiento especial por su amor a la literatura, a los libros, y que permite asociar la realidad con el mundo de los libros: en otras palabras, no distinguen la realidad que se mira a través del cristal de su ventana de las ficciones literarias. Otro encuentro afortunado es con Kattie, una niña de 10 años que le ayuda a Florence en la librería y que, a la larga, se encargará de defender sus ideales y hacerles justicia.
Una mención aparte merece la adaptación fílmica de la novela La libreríade la novelista inglesa Penélope Fitzgerald. Se conservó el personaje narrador, la cadencia de la historia, así como la gran cantidad de referencias literarias. La cinta muestra, por ejemplo, la sacudida y asombro de los lectores ante Lolita de Vladimir Nabokov, el clásico contemporáneo que por la censura y su maestría llegó a lo más alto de la estimación literaria. Asimismo, la cinta da cuenta del deslumbramiento de Mr. Edmund Brundish por Ray Bradbury y su Fahrenheit 451.
Por estos motivos, la película causará en los lectores una gran identificación en muchos de los hábitos y sentimientos que hay cuando se acude a una librería, cuando se abre un libro y cuando se concluye uno. Permite confundir ese acto único de contemplación y quietud que es la lectura: el proceso de transformación de los seres de tinta y papel en mujeres y hombres en la gran pantalla.
La librería se estrenó en la Seminci de Valladolid. Fue parte de la Selección oficial del Festival de Berlín de 2017. Tiene más de 30 nominaciones y ha obtenido 13 premios, entre los que destaca el Premio Goya a mejor película, mejor dirección y mejor guion adaptado.