Vivimos en una época donde las personas buscan maximizar el placer a través de experiencias sensoriales inigualables. Tal vez esto responde a lo que Gilles Lipovetsky —sociólogo francés— ha denominado como la era hipermoderna y hedonista.

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No obstante, y más allá del debate sobre los daños que esto puede generar en las sociedades contemporáneas, resulta indudable que dicho proceso también ha tenido repercusiones positivas en diversas manifestaciones culturales, siendo una de ellas la gastronomía.

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Y es que, sin duda, estamos en una época donde la cocina se reinventa como movimiento artístico y hoy los chefs se han convertido en portavoces de dicha revolución, recibiendo la atención de los medios de comunicación —los vemos todos los días en revistas, filmes, libros, programas de televisión, entre otros. 

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Ante este panorama, la empresa Netflix no se ha quedado atrás y ha aprovechado el momento para crear una de sus series originales más impresionantes y seductoras: Chef´s Table.

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A lo largo de cada uno de los 18 capítulos que componen sus tres temporadas, los espectadores pueden disfrutar de una amalgama de imágenes y sonidos que nos adentran en la personalidad de los hombres y mujeres que están revolucionando el mundo gastronómico.

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Cada toma nos va desvelando la incertidumbre que provoca sus temores y angustias, sus sueños y anhelos, lo cual termina derivando en la posibilidad de conocerlos en su fase más íntima: aquella que surge durante el proceso creativo que les permite transformar los ingredientes en obras de arte que se pueden degustar en múltiples ámbitos.

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En este sentido, la serie es un claro homenaje a la belleza que una acción humana puede alcanzar; sin embargo, la fascinación que produce no se limita a eso pues nunca escatima recursos al momento de narrar las grandes historias de los genios, mostrando las adversidades que lograron superar para hacer que su pasión por la cocina se convirtiera en el trabajo que realizan todos los días.

    

Todo lo cual se encuentra contextualizado con las experiencias que críticos, amigos y familiares cuentan sobre los recuerdos de la trayectoria de cada uno de los chefs.

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Cabe señalar que la música es sumamente cautivadora —incluye a los máximos exponentes del repertorio clásico— y va de la mano con una serie de imágenes explosivas que reflejan el ritmo, la violencia y creatividad que se viven al interior de una cocina, haciendo justicia a todos aquellos que día tras día se esmeran hacer de la comida una experiencia sensorial única. 

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Por otra parte, ver Chef´s Table implica hacer un viaje por toda la geografía del planeta donde la escena culinaria se encuentra en plena efervescencia, lo cual posibilita que los espectadores puedan comprender cómo el entorno y la cultura influyen en los chefs al momento de tratar con los ingredientes locales y encontrar su propio estilo. 

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El creador de la serie David Gelb —quien previamente captó la atención de los críticos gastronómicos con su trabajo documental Jiro Dreams of Sushi (2011)— declaró que no necesitabas ser un sibarita consumado para disfrutar de la serie pues es un programa sobre gente creativa e inspiradora que cocina, y las lecciones que ellos han vivido pueden aplicarse a cualquier disciplina que requiera de creatividad.